fbpx

Carotenos: antioxidantes fotoprotectores

carotenos

En temporada estival, debido a los fuertes rayos solares que pueden afectar la salud dérmica y ocular, la principal recomendación que se hace a la población es evitar la exposición prolongada al sol. Nuestros abuelos nos decían: «come zanahorias que ayudarán a ponerse moreno y tener mejor vista». Efectivamente, tras investigaciones, se ha visto que esa relación es afirmativa y todo es gracias a los carotenos.

Si se tiene en cuenta que un breve tiempo de exposición es necesario para la síntesis de vitamina D, tomar medidas como el uso de cremas con factor de protección solar o de gafas con filtro UV el resto del tiempo, son necesarias para proteger la piel y los ojos de los efectos perjudiciales del sol.

Además, el consumo de alimentos vegetales o complementos dietéticos a base de antioxidantes naturales como los carotenos, también contribuyen a protegernos desde el interior.

Siendo una eficaz medida antienvejecimiento.

 

¿Qué antioxidantes actúan desde el interior protegiendo nuestra piel y ojos?

El término antioxidantes engloba numerosas sustancias presentes en diferentes alimentos de origen vegetal, como verduras, hortalizas y frutas.

A nivel protector de la piel y de los ojos, el grupo de antioxidantes que se relaciona con estos beneficios es el de los carotenos o carotenoides.

De este grupo destacan: β-caroteno, luteína, zeaxantina y licopeno.

 

Carotenos en las plantas

El grupo de carotenoides está formado por componentes de diferentes tipos.

Los carotenos pueden presentar color amarillo, naranja y rojo, y se encargan de proteger las plantas de la fotooxidación.

Es decir, actúan absorbiendo excesos de energía que pueden dañarlas.

Otro grupo de carotenos se encarga de proteger las plantas de animales o insectos, actuando como sustancias tóxicas o repelentes.

En alimentos de origen vegetal como zanahoria, pimientos (verdes, rojos, amarillos), tomate, coles (de diferentes tipos), lechuga, espinaca, perejil, naranja, albaricoque, entre otras, se puede encontrar una gran variedad de estos carotenos.

Especies reactivas que dañan el organismo

Los carotenos actúan frenando la producción excesiva de radicales libres, especialmente, de aquellos que provienen de reacciones fotosensibles.

La luz puede convertir diferentes moléculas a  formas moleculares excitadas de vida corta, pero que pueden reaccionar con otras de su misma especie para formar una molécula estable.

Esta molécula formada es la que reacciona con otros tipos de moléculas y, en ciertos casos puede generar especies reactivas de nitrógeno y oxígeno que dañan las células.

O puede reaccionar directamente con el oxígeno y formar el llamado oxígeno singlete.

El oxígeno singlete es una molécula muy reactiva, responsable de la peroxidación de lípidos.

Esta peroxidación ocurre cuando los radicales libres reaccionan con los ácidos grasos.

También inactiva proteínas y enzimas, y oxida residuos de guanina (base nitrogenada) en el ADN o ARN.

 

Carotenos para la salud dérmica y ocular

Nuestro organismo dispone de mecanismos específicos que también actúan reduciendo la producción de radicales libres.

Por ejemplo, las enzimas superóxido dismutasa (SOD), glutatión peroxidasa y catalasa, se encargan de esta defensa en el organismo.

Sin embargo, con el avance de la edad y como resultado de la interacción entre factores genéticos y ambientales, estos sistemas pueden reducir su eficacia.

Por ello se recomienda el consumo de sustancias antioxidantes que actúen en la lucha contra los radicales libres.

Diferentes estudios han mostrado que los carotenoides son muy efectivos en la inactivación del oxígeno singlete, frenando el daño fotoxidativo causado por esta molécula reactiva.

Algunos de estos carotenos son:

También conocido como pro-vitamina A, protege del riesgo de cáncer de piel como consecuencia de la radiación UV.

Tiene capacidad para inhibir las especies reactivas de nitrógeno, oxígeno.

También inhibe el oxígeno singlete causante de la peroxidación lipídica en los liposomas y en los sistemas biológicos.

Y resulta eficaz como agente fotoprotector, bloqueando las reacciones fotoquímicas en la epidermis por la exposición a rayos UV.

  • Licopeno

Este caroteno presente principalmente en el tomate y en sus derivados, no tiene función pro-vitamina A.

También contiene otras sustancias antioxidantes como, la vitamina E (tocoferol) y las antocianinas.

Ensayos clínicos realizados suplementando licopeno (pasta de tomate) en la dieta, mostraron la capacidad de este caroteno para ayudar a reducir el daño del ADN, tras la exposición a los rayos solares UV.

  • Luteína

Este componente actúa como filtro protector de las plantas frente a la luz.

Por esto se cree que puede tener el mismo efecto en los tejidos humanos.

Sobretodo, en la piel y en la retina.

A esto se le atribuye su papel en la mejora de la visión y en la prevención de la degeneración macular.

Pertenece a la familia de las xantofilas, sus fuentes alimentarias  son alimentos de origen vegetal.

Ejemplos: algas, acelgas, espinacas, lechuga, puerros, brócoli, repollo, col, maíz, tomate, plátano, perejil, apio, calabaza, etc.

En alimentos de origen animal, la luteína se encuentra en la yema de huevo, pero su concentración dependerá de la alimentación que hayan tenido las gallinas.

Los pétalos de la flor maravilla (Marigold) es otra fuente de luteína, pero se emplea en la fabricación de complementos antioxidantes.

  • Zeaxantina

Este caroteno también pertenece a la familia de las xantofilas y no puede convertirse en vitamina A.

Su aporte es mediante el consumo de alimentos marinos (gambas, pescados, huevas y algas).

O en forma de complementos dietéticos (Haematococcus pluvialis).

Al igual que el β-caroteno, la zeaxantina tiene capacidad para atrapar especies reactivas como el oxígeno singlete.

Incluso parece ser más efectivo que el β-caroteno. 

Además de su propiedad antioxidante, tiene propiedad antiinflamatoria e inmunomoduladora.

La zeaxantina y la luteína son los únicos carotenoides que están en la mácula.

Por eso se les conoce como pigmentos maculares.

 

Alimentos y complementos dietéticos

Con el consumo de una dieta rica en vegetales o de un complemento antioxidante, se pueden obtener estos beneficiosos componentes.

Así se contribuye a prevenir el daño oxidativo por los rayos solares UV, a nivel dérmico y ocular.

Y se favorece el antienvejecimiento.

 

 

 

Related products

Ir al contenido