¿Por qué funciona?:

La función normal del hígado, el sistema inmunológico y la respiración son esenciales para su bienestar. Sin una buena función respiratoria, su cuerpo no obtendrá el oxígeno que necesita para funcionar normalmente.

La N-acetil-L-cisteína es un nutriente altamente biodisponible que apoya la salud respiratoria, así como la función hepática e inmunológica.

La N-acetil-L-cisteína es un nutriente de fácil absorción que tiene potentes beneficios para la salud de todo el cuerpo [1]. Este compuesto también es el precursor químico del glutatión [2-4].

El glutatión es un poderoso antioxidante que ayuda a proteger las células del daño de los radicales libres. Además, la investigación también ha revelado que, además de jugar un papel contra las toxinas, la N-acetilcisteína promueve la salud del sistema inmunológico [5].

También defiende contra las agresiones de compuestos extraños a nivel celular y ayuda a proteger las neuronas vulnerables del estrés oxidativo. Debido a su rápida tasa de absorción, la N-acetil-L-cisteína es un nutriente potente por derecho propio.

La ciencia detrás del producto:

La N-acetilcisteína se deriva del aminoácido cisteína simple que puede ofrecer una protección significativa contra un amplio número de toxinas [5]. Estos incluyen acroleína (que se encuentra en el humo de los cigarrillos y los gases de escape de los automóviles), paraquat (un herbicida tóxico). La N-acetilcisteína puede desempeñar un papel en la protección del tejido pulmonar contra desafíos comunes a través de su actividad antioxidante [5].

Además, la N-acetilcisteína ayuda al cuerpo a sintetizar el glutatión. El glutatión es uno de los antioxidantes más importantes del cuerpo debido a su ubicación dentro de la célula, lo que aumenta su potencial para eliminar los radicales libres.

Los niveles elevados de glutatión han mostrado efectos particularmente positivos en aquellas personas con sistemas inmunológicos débiles [5]. Y más de 30 estudios controlados con placebo sobre el glutatión celular han demostrado que la N-acetil-L-cisteína puede afectar favorablemente la producción de energía, el bienestar y la calidad de vida [5].