fbpx

¿Tienes el colesterol alto? Algunos consejos para reducirlo y mejorar nuestra salud

El colesterol puede aparecer a medida que envejecemos

El colesterol es una sustancia de origen graso que se encuentra formando parte de las membranas celulares del organismo y de diferentes sustancias necesarias para su buen funcionamiento como la bilis, las hormonas sexuales, entre otras. Sin embargo, a pesar de su importancia, tener un nivel elevado de colesterol en el organismo se considera un factor de riesgo para la aparición de enfermedad cardiovascular. Este aumento de colesterol puede ser ocasionado por diversos factores exógenos (mala alimentación, sedentarismo, uso de medicamentos…) o endógenos (síntesis aumentada por nuestro propio organismo). Además, a medida que envejecemos, especialmente en el caso de las mujeres, cuando se inicia la menopausia disminuye la síntesis de estrógenos, lo que ocasiona un aumento de los niveles de colesterol y, con ello, un mayor riesgo de problema cardiovascular.

Por este motivo, es importante el mantenimiento de unos correctos niveles de colesterol sanguíneo en cualquier etapa de nuestra vida. A continuación, enumeramos algunos consejos eficaces para ayudar a reducirlo y mantener nuestra salud en buenas condiciones.

Consejos para reducir la hipercolesterolemia

El colesterol es una molécula esteroidea que está presente en todas las membranas celulares de nuestro organismo. Esta molécula es capaz de circular a través de la sangre gracias a su unión a ciertas proteínas que dan lugar a la formación de las llamadas lipoproteínas, siendo las más conocidas la lipoproteína HDL (High density level) y la LDL (Low density level).

  • La HDL se encarga de transportar el colesterol desde los diferentes tejidos hacia el hígado para que ahí  sea metabolizado y pueda eliminarse, lo que se traduce en un efecto beneficioso para el organismo.
  • La LDL transporta el colesterol desde el hígado a los diferentes tejidos depositándolos en las paredes de las arterias cuya acumulación, junto a otras sustancias, dan paso a la formación de la placa de ateroma favoreciendo el desarrollo de la arterioesclerosis.
  • Actualmente, se consideran como niveles normales de colesterol: LDL < 100 mg/dl, HDL ≥ 60 mg/dl y colesterol total ≤ 220 mg/dl.

Si bien es cierto que la mayor parte del colesterol es endógeno y participa en el buen funcionamiento del organismo, el colesterol también lo obtenemos de forma exógena a través de la alimentación. Si el aporte dietético de colesterol y, sobre todo, de grasas saturadas es elevado, los niveles de colesterol sanguíneo pueden aumentar, lo cual dependerá de la absorción intestinal y de las variaciones genéticas existentes en la población que favorezcan este aumento.

Los  alimentos que se relacionan con la hipercolesterolemia de origen dietético y favorecen el aumento del colesterol LDL son los de origen animal, debido a que son ricos en grasas saturadas, así como también, los alimentos procesados que contienen grasas trans y  grasas vegetales (palma) que, a pesar de su origen, también aportan grasas saturadas.

Por este motivo, cuando se requiere un tratamiento para reducir los niveles altos de colesterol éste debe centrarse en la mejora de la alimentación, y optar por el consumo de sustancias que regulen su síntesis endógena.

Teniendo en cuenta esto, los consejos a seguir son:

  • Aumentar el consumo de verduras, hortalizas, frutas y legumbres. Ésta es una de las primeras medidas a tener en cuenta para reducir el colesterol alto en sangre. Su aporte en vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra los convierten en alimentos indispensables en la dieta diaria. Las vitaminas B6, B9 y minerales como el magnesio participan en el metabolismo y disminuyen el riesgo de enfermedad cardíaca. Además, en las legumbres podemos encontrar componentes fitoquímicos como las saponinas que disminuyen la absorción del colesterol a nivel digestivo.
  • Incorporar el consumo de nueces y de aceite de oliva virgen en la dieta. Los efectos beneficiosos que aporta el consumo de estos alimentos en la salud cardiovascular han podido ser demostrados en el estudio PREDIMED diseñado para evaluar si la dieta mediterránea con un consumo diario de nueces y aceite de oliva virgen es eficaz para prevenir la aparición de enfermedades crónicas, dentro de las que se incluyen, las enfermedades cardiovasculares. El ácido alfa-linolénico (omega-3), los fitoesteroles y el ácido oleico son los principales componentes de estos alimentos que favorecen la reducción del colesterol LDL y aumentan el colesterol HDL.

  • Incrementar el ejercicio físico. Otro de los factores que puede ayudar a reducir los niveles altos de colesterol es el ejercicio físico moderado. El ejercicio también tiene efectos positivos sobre el sistema cardiovascular por lo que, incluirlo  en la lucha contra el colesterol siempre es una buena opción.
  • Uso de complementos dietéticos. Para aquellas personas que tienen unos niveles altos de colesterol y que los anteriores consejos no le son suficientes, la toma de un complemento dietético es una buena opción. Dentro de la amplia gama de complementos que se pueden encontrar en el mercado, los que han demostrado ser eficaces en la reducción de los niveles altos de colesterol, sobre todo, de tipo endógeno son los que contienen monacolina K de la levadura de arroz rojo, compuesto que ha demostrado en diversos estudios su eficacia en el mantenimiento de unos niveles normales de colesterol en sangre.

Otras de las sustancias que luchan contra las hiperlipemias y contribuyen al buen funcionamiento cardiovascular son los ácidos grasos omega-3, que como anteriormente habíamos comentado, están presentes en las nueces pero, además, podemos encontrarlo en el pescado azul en este caso en forma de perlas de aceite que aseguran el aporte de una buena concentración de omega-3.

Como podemos ver el colesterol es necesario para que nuestro organismo funcione correctamente, pero es importante vigilar que se mantenga en unos niveles adecuados ya que su aumento puede llegar a perjudicar nuestra salud. Este aumento por lo general suele ocurrir por una alteración en la síntesis endógena pero también por el alto aporte dietético de grasas saturadas, por lo que es recomendable moderar el consumo de grasas de origen animal y de alimentos procesados

Y por último, recordar que existen complementos dietéticos que pueden ayudar a mantener unos correctos niveles de colesterol sanguíneo.

Ir al contenido